El 14 de marzo, tras la declaratoria de la emergencia sanitaria en el país, el templo de Señor de los Milagros, suspendió la misa campal de sanación, la cual se oficia tradicionalmente sobre la plazoleta Lourdes, y además, los Padres Redentoristas, custodios del Cristo, atendiendo las disposiciones del Decreto DAM-1100-041-2020, cerraron la basílica para hacerle frente a la pandemia del Coronavirus.
Desde hace 100 días, devotos del negrito de Buga, se consuelan con llegar hasta las puertas del templo a orar por el fin de la pandemia, otros, se inclinan por varios minutos para dar gracias por los milagros recibidos o para solicitar ayuda divina para superar alguna enfermedad.
Segun conoció Valle al Instante, se han realizado varios reuniones entre los Padres Redentoristas y funcionarios del área de salud pública de la alcaldía de Buga, con el propósito de ajustar los protocolos que permitan adelantar una prueba piloto para la reapertura del templo.
El cierre total de la Basílica ha tenido un efecto devastador para los cerca de 500 comerciantes que subsisten de la fe, en su mayoría, los afectados son vendedores de reliquias, propietarios de restaurantes, cafeterías, entre otros.
Según Wilmer López Jiménez, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Buga, con base a las proyecciones del Sistema de Información Turística del Valle, comerciantes habrían dejado de percibir más de 15 mil millones de pesos, solo, en Semana Santa.
En el recorrimos que hicimos por el sector se puede evidenciar en un 50%, locales comerciales con letreros de se arrienda y en venta, quienes tratan de resistir la crisis han puesto algunos elementos, no todos, en venta refrigeradores, sillas, electrodomésticos. Recursos son empleados para pagar arrendamiento y servicios públicos.
Por ahora, los Padres Rentoristas y comerciantes esperan la autorización del gobierno nacional y local para la reapertura del templo y los cerca de 500 establecimientos establecimientos de comercio.
